Los peligros de Facebook

¿Amante de las redes sociales? ¿Te gusta publicar tu actividad constantemente y aceptas cualquier invitación que llegue a tu cuenta de Facebook? Ten cuidado. Aunque no es la única red social popular, es la preferida por muchas personas inescrupulosas para seducir y engañar a miles de adolescentes y jóvenes en todo el mundo. Lamentablemente, nuestro país no es la excepción. 

Basta tomarse un par de minutos para revisar las noticias del día y conocer casos preocupantes. Los más chicos nos hemos vuelto una población vulnerable por lo que es sumamente importante empezar a tomar acciones preventivas. Menos mal estamos nosotros aquí para darte los tips que te ayudarán a estar más ‘mosca’ ante un movimiento extraño e impedir que caigas en las manos equivocadas. Ve por tu cuaderno y lápiz, y toma nota:

Si te buscamos ahora en Facebook, ¿qué podríamos ver y qué no? ¿Nos enteraríamos de todo lo que compartes? ¿Tu configuración es totalmente pública o has configurado la privacidad de fotos y publicaciones? Revísala ahora mismo y trata de que lo importante no sea público.  

Lo ideal es ser precavidos. Si recibimos la solicitud de amistad de una persona que no conocemos, no hay razón para aceptarla. Es mejor guardar distancia y evitar contacto con aquellas personas que no tienen ningún tipo de vínculo con nosotros. Eso no convierte a todos los usuarios que te contacten en una terrible amenaza, pero como reza el dicho: “más vale prevenir que lamentar”.

Es también común que para acercarse a ti, personas extrañas utilicen fotografías que no corresponden a su identidad real. Pocas imágenes, fotos sin reacciones o comentarios de amigos, puede que manifiesten una cuenta de Facebook recientemente creada o que es utilizada solamente para captar personas. Cuando recibas el add de un amigo que ya tiene una cuenta creada, sería ideal preguntarle, por otro medio, si esta nueva le pertenece realmente. 

No es necesario tenerte en tu red de contactos para que un extraño inicie una conversación a través del chat de Facebook. Si recibes un mensaje bajo la advertencia de “x persona está tratando de comunicarse contigo”, piensa dos veces si vas a responder o no. Si no aceptas la solicitud de mensaje, la persona nunca sabrá si llegaste a ver el mensaje; sin embargo, si lo aceptas, resultará fácil para él o ella seguir intentando mantener comunicación contigo. 

Cada caso es distinto, sin duda, pero debes evaluar la intención de emisor para descubrir si en verdad sus motivaciones no son algo atípicas. Ahora, tú puedes decidir siempre hasta donde llevar una charla con un extraño. Recuerda, no estás en la obligación de entablar una conversación con alguien que no conoces bien. Si el diálogo aparentemente normal se torna en hostigamiento, díselo a tus padres, hermanos mayores o alguna persona de confianza. Nunca te calles. Nunca. 

Muchas veces utilizamos nuestras redes para ser polémicos o generar espacios de debate. Aunque seguro que existen sitios alturados para hacerlo, en una plataforma digital con gente que se cubre tras un ordenador es un tanto peligroso generar riñas innecesarias. Prefiere ignorar a quien no merece tu atención y apartarte de conflictos, nunca falta alguien que se lo tome personal. 

No estás solo

Como verás, tener una cuenta en una red social es super divertido, es casi una necesidad primaria en esta época de comunicación ágil e instantánea, pero no olvides, el desarrollo tecnológico también posee sus propios riesgos. Sé cauto, no confíes en todo lo que ves o lees y trata de conservar en privado aquello que solo es de interés para ti o a tu grupo cercano. Y no olvides, si eres víctima de acoso, denuncia al agresor, conversa con tus profesores, amigos cercanos; y sobre todo, con tus padres. No estás solo. 

Si conoces de algún caso en particular o de alguien a quien le pueda servir esta información, no esperes más para compartirla.